CON-TRASTE-SONORO

Artefacto sonoro inmersivo instalado en el andén de la carrera 7 con calle 40 en Bogotá Colombia; está realizado a partir del registro y mezcla de diversos paisajes sonoros de los cerros que bordean a esta ciudad por el oriente y le permite a los peatones interactuar con esos sonidos y modificarlos a partir del movimiento del cuerpo, para motivar la práctica de otros modos de percibir el entorno sonoro cotidiano y de esta forma promover la escucha atenta de estas montañas, para posibilitar reflexiones críticas acerca del contraste con la producción sonora de la ciudad.

Pontificia Universidad Javeriana

Instalación sonora espacializada a cuatro canales. Disposición lineal 4.2 (4 audioparlantes y dos sub-bajos)Montaje en el espacio público.

El artefacto se estructura a partir de la reproducción, por cuatro canales de audio independientes, de los sonidos registrados y procesados, lo que produce una espacialización sonora envolvente que deja inmersos a los peatones dentro de una experiencia que da cuenta de los diversos objetos sonoros que se encuentran en los cerros orientales. Estos paisajes sonoros relocalizados son modificados en tiempo real por los datos obtenidos de dos sensores infrarrojos que detectan el movimiento de los peatones y de los vehículos que transitan el lugar, lo que produce una alteración de los audios que se mezcla con los sonidos cotidianos y produce un paisaje sonoro emergente.

El diseño de este artefacto, propone a los peatones la inmersión en una experiencia sonora significativa, que invita a tener una escucha atenta centrada en el contraste entre los paisajes sonoros de la ciudad y los de los cerros orientales, los cuales son relocalizados al ser escuchados en un lugar diferente del que los origina. Esta tensión propicia la reflexión desde la dimensión sonora, acerca de los contrastes entre los cerros orientales y la carrera séptima, para lograr reconocer y apreciar las divergencias y convergencias de los elementos que los caracterizan.

En primer lugar, el propósito del diseño de este artefacto, es crear una intervención en el espacio público sobre la carrera séptima, en donde se puedan percibir los cerros orientales, no solo de forma visual, como se hace cotidianamente, sino también auditiva, para generar así, una experiencia estética que permita re-significar las relaciones con esta estructura ecológica principal. En segundo lugar, el propósito es el reconocimiento sensible del paisaje sonoro urbano de la carrera séptima, que permite la identificación de los diversos objetos sonoros que lo componen para reconocer incluso los que puedan ser considerados como importantes para la ciudad y sus habitantes, más allá de la valoración negativa que suelen tener los sonidos predominantes del tráfico vehicular.

De acuerdo con lo anterior, la experiencia se plantea desde una narrativa audiovisual que construye principalmente un diálogo sonoro contrastado entre las dos estructuras urbanas estudiadas, la cual sensibiliza a los sujetos que habitan el artefacto, para establecer relaciones que propicien el re-conocimiento y apropiación de estos espacios urbanos por parte de los habitantes de la ciudad. Es así como, los contrastes sonoros pretenden generar una presencia de los cerros orientales en los habitantes, que irrumpe en la forma cotidiana de percibirlos, para producir una experiencia que incorpore la producción de sentido desde la dimensión sonora. De esta manera, se contribuye con la formación de una cultura sonora urbana, que le posibilita a sus habitantes la elaboración de reflexiones críticas, para establecer una ecología del paisaje sonoro urbano, desde donde se pueden proponer metodologías emergentes para diseñar y habitar el espacio público, incluyendo la dimensión sonora como una categoría fundamental.